El departamento de Agricultura de Estados Unidos informó ayer lunes de la detección de un nuevo caso de gripe aviar en el estado de Iowa, en una granja de gallinas ponedoras, después de que la semana pasada 27.000 pavos tuviesen que ser sacrificados en ese mismo estado al contraer el virus. La granja infectada se encuentra en el condado de Osceola, al noroeste de Iowa, y cuenta con capacidad para 5,3 millones de gallinas ponedoras, que serán sacrificadas para evitar el contagio a otras granjas.
El brote detectado corresponde al virus H5N2, el mismo que la semana pasada se detectó en una granja de pavos en el condado Buena Vista, y los científicos creen que éste se está extendiendo a través de las defecaciones de las aves migratorias a lo largo del río Misisipí. Iowa es el principal productor de huevos de EE.UU., con una industria que mueve en el estado alrededor de 2.000 millones de dólares, y que produce uno de cada cinco huevos consumidos en el país.
Desde principios de años, 12 estados han detectado casos de gripe aviar en algunas de sus granjas: Iowa, Arkansas, Idaho, Kansas, Minesota, Montana, Misuri, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Oregón, Wisconsin y el estado de Washington.