La cabaña española de aves de corral se alimenta sólo de piensos compuestos fabricados en España, elaborados con cereales de primera calidad y con grasas de origen vegetal (
soja y maíz, sobre todo), han indicado fuentes de la ANPP.
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La ANPP, Asociación Española de Productores de Pollo, ha insistido que la opinión pública debe estar tranquila ante la entrada de pollos belgas contaminados con dioxinas, porque España
«no importa ni un solo kilo de pienso compuesto de ningún país, al ser autosuficiente», y que las pocas grasas de origen animal que se utilizan «llevan un control estricto para evitar su mezclas».
El sector productor explicó que, aunque las autoridades sanitarias españolas han detectado la entrada de pollitos de un día, que fueron re-exportados a Portugal, y de 5.600 gallinas para el
sacrificio inmediato en la Comunidad Valenciana, «la cantidad es tan pequeña que no puede originar ningún problema para la salud».
ANPP apoyó totalmente la postura mantenida en el Comité
Veterinario Europeo de prohibir la exportación de aves y huevos de
Bélgica, pero al mismo tiempo exige «el cumplimiento más riguroso»
de la normativa comunitaria sobre sanidad y control en todos los
países de la Unión Europea.
Finalmente, el sector avícola pidió a los medios de comunicación
que transmitan a los consumidores españoles la máxima tranquilidad
sobre los productos españoles, porque son de alta calidad y ofrecen
todas las garantías sanitarias.
EFE
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