Según un informe del ICEX, la carne más consumida de estos tres tipos es la de pollo que procede fundamentalmente de la importación desde Brasil, EE.UU., China, Tailandia y Filipinas. Destaca además la gran producción nacional. El documento destaca la llegada a Japón de carne de ave etiquetada con el sello francés "label rouge" que se ha producida de una forma respetuosa tanto con el medioambiente como desde el punto de vista del bienestar animal.
En el caso de la carne de pato, Francia es el principal proveedor, al ser prácticamente nula la producción. La mayoría de la carne de pato importada son hígados y foie gras. Otros países exportadores son Brasil, EE.UU. y Taiwan y España apenas exporta a excepción de foie gras ya procesado.
En cuanto a la carne de conejo, el consumo en Japón se realiza a base de producto procedente de China, España e Italia. Es un nicho de mercado muy pequeño y se ciñe fundamentalmente a restaurantes de cocina mediterránea.
Desde el ICEX destacan que hay oportunidades para este sector en las empresas españolas interesadas en exportar a Japón siempre y cuando traten de destacar la calidad del producto centrándose para ello en la carne de pollo de corral o ecológico. Las ferias, seminarios y degustaciones son una de las vías de entrada para dar a conocer los productos y establecer contactos comerciales.