La
Comisión Europea ha levantado, de forma parcial, el embargo a la importación
de productos chinos de origen animal. El Gobierno de Pekín, por su parte,
no ha autorizado todavía la entrada de carne europea en China.
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Desde
el pasado día 18, la carne de conejo, las gambas, el pescado de piscifactoría,
la miel y la gelatina chinos podrán entrar en la UE, aunque el embargo
se mantiene para la carne de pollo, ave, cerdo, ternera y los productos lácteos»,
señaló el ministro consejero de la Delegación de la UE en
China, Franz Jessen.
Respecto a la prohibición de la carne de cerdo
y ternera europea, Jessen dijo: «vamos a realizar una petición firme
a China para resolver esta situación». «No hay una fecha precisa
sobre cuándo vamos a empezar, pero por supuesto es un asunto que surge
siempre en nuestros grupos de trabajo», añadió.
Para
exportar alimentos europeos a China «necesitamos tener un protocolo firmado,
y este proceso es extremadamente largo, puede durar hasta siete años»,
indicó Cyril Sayag, primer secretario de la Delegación de la UE
responsable de Comercio.
El veto a la entrada en Europa de productos chinos
de origen animal data de enero de 2002 y se decidió por la presencia de
sustancias químicas y antibióticos prohibidos en estos productos.
Jessen señaló que China «ha puesto en marcha una serie de medidas
correctivas que hemos verificado a través de nuestros inspectores de la
Oficina
de Alimentación y Veterinaria«. Estas medidas han sido claves
para que la Comisión
decidiera levantar el embargo, mientras que mantiene una «preocupación
por la calidad sanitaria» y algunas «enfermedades animales», como
la gripe aviar.