Los ganaderos de la UE pidieron el pasado 26 de abril a la Comisión Europea
que ponga fin a las importaciones al mercado comunitario de filetes de pollo salados
y congelados de Brasil y Tailandia, según un comunicado del COPA-COGECA.

———————————————–

El Comité de Organizaciones Agrarias y Cooperativas (COPA-COGECA) de
la UE denunció que los envíos de ese producto a la UE «han
aumentado considerablemente en los últimos años y han pasado de
3.000 toneladas anuales, en 1996, a más de 400.000 toneladas, en la actualidad».

Explicó que este incremento se debe a que los aranceles para estos alimentos
disminuyen notablemente si el producto está conservado en sal y, por
ello, los exportadores salan su carne -procedimiento innecesario para conservar
un producto congelado-.
Los productores reclamaron que la Comisión «ponga fin a estas importaciones
desleales que perjudican a los productores de pollos de los países comunitarios».
Solicitaron medidas sanitarias «más regulares» para vigilar
la introducción de carne de pollo y huevos de ciertos países terceros,
como los controles acordados por la Comisión en enero.

En enero, la UE suspendió las importaciones a Europa de productos chinos
de origen animal, para evitar la entrada de restos de sustancias prohibidas.

Etiquetas:

Deja una respuesta