La Organización Interprofesional de la Carne de Pollo (Propollo) destacó
que la calidad, la seguridad alimentaria y el buen precio de la carne de pollo
hacen que el sector avícola goce de una «salud fenomenal» y apueste
por la modernización.
El jueves 19 de octubre, el presidente de Propollo, Federico Félix, explicó
durante una rueda de prensa ofrecida en el Salón
Internacional de la Tecnología Ganadera, Expoaviga, celebrado en Barcelona,
que, a pesar de la crisis sufrida por el sector este año a causa de la
«injustificada alarma social suscitada por la influenza aviar», los
avicultores están satisfechos.
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La Organización Interprofesional de la Carne de Pollo (Propollo) destacó
que la calidad, la seguridad alimentaria y el buen precio de la carne de pollo
hacen que el sector avícola goce de una «salud fenomenal» y apueste
por la modernización.
El jueves 19 de octubre, el presidente de Propollo, Federico Félix, explicó
durante una rueda de prensa ofrecida en el Salón
Internacional de la Tecnología Ganadera, Expoaviga, celebrado en Barcelona,
que, a pesar de la crisis sufrida por el sector este año a causa de la
«injustificada alarma social suscitada por la influenza aviar», los
avicultores están satisfechos.
Esta satisfacción se debe a que, a pesar de la insistencia de la Organización
Mundial de la Salud cuestionando la conveniencia del consumo de carne de pollo
en prevención de una pandemia de influenza aviar, los consumidores españoles
han seguido confiando en la carne de pollo.
Félix explicó que durante tres semanas los productores arrastraron
una caída del consumo que alcanzó el 15 %, que en un país
donde se sacrifica un millón de pollos a la semana genera muchos excedentes
y un desplome de precios.
Pese a las pérdidas sufridas, aún sin cuantificar, desde Propollo
se sienten satisfechos, tanto por la respuesta de la sociedad, que confía
en un producto sano, saludable, asequible y de calidad, como por el mensaje de
las distintas administraciones, que siempre respaldaron el buen hacer del sector.
Hizo hincapié en que el sector cuenta con la trazabilidad como herramienta
de garantía al consumidor, ya que cada pollo que llega al consumidor va
acompañado de información acerca de sus abuelos, padres, dónde
se ha criado, sacrificado y comercializado.
Félix destacó el papel social de la carne de pollo y de los avicultores,
que han conseguido con una actividad rentable poner a disposición de la
sociedad un producto de alto valor proteico al alcance de todos los bolsillos.
Apuntó que el sector en España ocupa a más de 100.000 familias
y tiene un gran potencial de crecimiento, tanto por las perspectivas al alza del
consumo como por el potencial de producción, que ha situado a España
como segundo productor europeo de carne de pollo.
Por su parte, el presidente del Colegio
de Veterinarios de España, Juan José Badiola, reiteró
que de las 241 muertes humanas provocadas por la influenza aviar en el mundo ninguna
se ha demostrado a que se deba a la ingesta de carne de pollo enfermo.
Badiola insistió en que los contagio de aves a humanos siempre se han debido
al contacto directo y prolongado con los animales y todos se han dado en regiones
donde los sistemas de producción no tienen nada que ver son las condiciones
higiénico-sanitarias con que se producen en España y en la Unión
Europea.
El ponente destacó también que el avícola es un sector «serio
y riguroso», que hace bien las cosas y, aun así, ha sufrido las pérdidas
derivadas de una pre-crisis alimentaria que ha cuestionado unas producciones sanas,
saludables y que ofrecen total garantía de seguridad alimentaria.
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