Los datos presentados por la Comisión Europea en su Comité de Gestión del mes de septiembre avanzan unas previsiones de producción ligeramente inferiores a las del año pasado en los últimos meses de 2014, pero no tan marcadas como parecería desprenderse de las cifras de reposiciones. Los datos de precios del mercado del huevo en la UE muestran una situación de estabilidad y bajos precios en estos dos últimos años tras la adaptación, que no parece contagiarse de variaciones en el mercado mundial. El repunte reciente en los precios de la industria en la UE es mínimo ante la increíble escalada de la clara en polvo en EE.UU. en los últimos dos años. Tras alcanzar los 250 €/10 kg, está en los 240€/10 kg, y tira al alza del precio del huevo entero en EE.UU. Mientras tanto, en la UE el precio de la clara está estabilizada en torno a 100 €/10 kg y el huevo entero se queda en los 50 €/10 kg. en 2014, unos 20 € menos que en USA, donde ha subido desde la primavera superando el precio de la UE.
En estas condiciones no es de extrañar que las importaciones comunitarias de huevos (excluidos los de incubar) hayan bajado entre enero y julio un 51% (fundamentalmente procedentes de EE.UU. e India) y que hayan aumentado un 9% las exportaciones (a Japón e Irak , sobre todo). En el mercado mundial, Turquía está posicionándose como el principal exportador de huevos, seguido de Estados Unidos, China y la UE.
El mercado del huevo europeo sufre un fuerte desequilibrio (por exceso de oferta de grandes productores como Alemania, Francia e Italia) desde que en 2012 se produjo la adaptación de las jaulas de ponedoras, agravado por la caída de consumo en países en crisis del Sur y Este. Su único consuelo por ahora es la reducción de los costes de producción por la bajada de precio de las materias primas en el mercado mundial.
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