La multinacional estadounidense Cargill empezó a fabricar su primera fábrica dedicada a generar productos de nutrición animal libres de medicinas y antibióticos la semana pasada.
La nueva instalación de premezcla y nutrición de Cargill, ubicada en Lewisburg -Ohio-, tiene un presupuesto de 50 millones de dólares para su construcción y será oficialmente la primera para la compañía en dedicar 100% sus esfuerzos en una producción natural. Los piensos no medicalizados irán destinados a animales de producción, ganado, vacas y aves de corral, y existe la posibilidad de expandir el negocio ofreciendo piensos a un nuevo mercado, el de las mascotas.
La compañía, que ya ha dicho que en 2019 finalizará las obras, lleva 4 años gestando este proyecto y, según asegura Dean Barker, director de operaciones de negocio de premezcla y nutrición de Cargill en EEUU., esta inversión es complementaria a su expansión en productos naturales y aditivos. Por otro lado, Barker ha agregado que “como los consumidores prefieren una mayor transparencia en sus compras de alimentos y más opciones sin antibióticos, será fundamental que seamos proactivos en la fabricación de nuestras premezclas y productos nutricionales de manera eficiente, segura y con integridad. Hay un aumento en las compañías de alimentos que reclaman instalaciones de producción libres de medicamentos para asegurar una cadena de suministro libre de riesgo”.
Será fundamental que seamos proactivos en la fabricación de nuestras premezclas y productos nutricionales de manera eficiente, segura y con integridad.
La nueva fábrica tiene previsto alcanzar una superficie de alrededor 20,400 metros cuadrados y contará con una planta que incluirá cuatro líneas de producción y podrá generar unas 86,000 toneladas de productos de nutrición animal al año. Además, también podrá crear mezclas personalizadas solicitadas por el cliente. La fábrica, de momento, sólo abastecerá clientes de los Estados Unidos.
Barker también ha comentado que «la instalación fue diseñada para asegurar que la contaminación cruzada no ocurriera». Para ello, «el diseño presenta la capacidad de separar líneas de producción por tasas de inclusión para proporcionar de manera segura a los clientes productos de baja inclusión con precisión exacta», finalizó. Además, con el objetivo de eliminar errores humanos, la multinacional ha mejorado las capacidades de automatización.
La instalación fue diseñada para asegurar que la contaminación cruzada no ocurriera
Cuando la fábrica se ponga en funcionamiento, ésta será una adición a las seis instalaciones de producción de alimentos premezclados y de nutrición de Cargill que actualmente operan en los EEUU.
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