Tras el diagnóstico de la enfermedad en una granja del centro de Suecia la semana pasada, la OIE alerta de un nuevo foco, esta vez en Noruega.
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La Oficina Internacional de Epizootias alertó ayer de la aparición
de un nuevo foco de la enfermedad de Newcastle en una explotación avícola
del departamento noruego de Buskerud, en el sur del país. La granja contaba
con 112 aves que ya han sido sacrificadas, aunque sólo desarrollaran
la enfermedad 50 de ellas.
En esta ocasión también se desconoce el origen de la infección,
aunque los servicios veterinarios noruegos han señalado como agente etiológico
posible el paramixovirus de las palomas. El último caso acontecido en
el país data de 1996.
Para más información pueden dirigirse a www.oie.int