La interprofesional francesa del huevo, alerta ante la prohibición del sacrificio de pollitos

En una carta al Ministro de Agricultura pide tiempo y ayudas para la adaptación

La CNPO – interprofesional del huevo de Francia – alerta en sus recientes notas de prensa de las dificultades que supone la prohibición del sacrificio de pollitos en el país, prevista para finales de 2022. En su carta del pasado 3 de septiembre pide al Ministro de Agricultura que discuta este tema urgentemente con todos los profesionales del sector del huevo. Si bien éstos ya están en condiciones de realizar todos los ajustes e inversiones necesarios, no pueden cumplir con los plazos anunciados por el Ministro, fijado para el final de 2022.

La CNPO destaca que el sexado in ovo implica técnicas muy caras. Además de los 15 millones de euros de inversiones necesarias para el equipamiento de las plantas de incubación, el sector ha estimado en 55 millones de euros anuales los costes operativos a asumir, o alrededor del 4% de la facturación anual del sector.

La aplicación de estas nuevas técnicas repercutirá inevitablemente en el coste de producción de los huevos y ovoproductos y en su competitividad. El sector francés asegura la autosuficiencia de Francia en huevos y ovoproductos, pero la medida abriría de par en par las puertas a las importaciones y entra en contradicción con el discurso del presidente de la República en el Gran encuentro de la Soberanía Alimentaria el 18 de mayo.

Francia no debería ser el único país europeo, junto con Alemania, en estar sujeto a una obligación nacional de sexado in ovo, indica la CNPO. La industria francesa del huevo no podrá hacer frente a tal distorsión de la competencia con los países vecinos. La sostenibilidad del sector solo puede garantizarse con el apoyo activo e inmediato del Estado, a la espera de que se establezcan normativas idénticas en todos los países de la Unión Europea. El Ministro declaró el 4 de septiembre, hablando sobre plaguicidas, que el tema debería “llevarse en adelante a nivel europeo. Estamos en un mercado común, por lo que este tema debe ser europeo. De lo contrario, estamos creando una competencia desleal, a expensas de nuestra agricultura y nuestro medio ambiente”. Y la misma lógica debe aplicarse en cuestiones de bienestar animal.

Francia se propone seguir la iniciativa de Alemania para prohibir el sacrificio de pollitos machos, incluso aunque las técnicas de sexado in ovo no están disponibles a escala comercial y la prohibición puede suponer la necesidad de criar a los pollitos machos de las líneas de puesta, una solución antieconómica.

 

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