México tiene preparado un banco de 70 millones de dosis de vacunas contra la influenza aviar en caso de alguna otra emergencia, además de un Plan de Acción para evitar esta enfermedad, que afectó este año a decenas de granjas.

Actualmente se mantiene la vigilancia en las granjas que fueron afectadas, donde ya ingresan aves. Por otra parte, el programa de vacunación se extenderá hasta marzo o abril próximos, una vez que concluya el periodo invernal.

Hasta ahora se contabilizan casi 100 días sin que se presenten nuevos casos de influenza aviar de alta peligrosidad (AH7N3), ni aislamientos virales en la población avícola de los Altos de Jalisco, la región del occidente mexicano mayor afectada este año por un brote, ni en ninguna otra parte del territorio nacional.

Con motivo de estas aves que fueron infectadas, se desarrolló en México la vacuna contra el virus AH7N3, en colaboración con la Productora Nacional de Biológicos Veterinarios y tres laboratorios privados, lo que permitió controlar el brote en cuatro meses. La vacuna se entregó a los productores a sólo 39 días de ser notificado el brote.

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