Reducción de la proteína de las raciones para Broilers
Introducción
Por más que desde hace tiempo se ha sugerido la conveniencia de reducir los niveles de proteína de las raciones de los broilers con el fin de ajustarse a las recomendaciones de la UE sobre emisiones de N a la atmósfera y al suelo, como las investigaciones realizada sobre ello no han cubierto el ciclo completo de producción, hemos querido profundizar en el tema.
Prueba
Para ello hemos realizado una experiencia con 5.000 pollitos Ross 308, recién nacidos y sin sexar, instalados sobre una yacija de paja granulada y sometidos al mismo manejo.
Su alimentación se basó en 4 períodos, desde el inicio a 10 días, de 11 a 16, de 17 a 30 y de 31 a 40 días, cuando finalizó la prueba, aumentando gradualmente los niveles de energía de las raciones en cada uno de ellos, desde 2.750 Kcal/kg al principio hasta 3.010 kcal/ kg al final. En cuanto a los tratamientos experimentales, mientras en el primer período fueron 2, con diferentes niveles de proteína, pero los mismos en aminoácidos, en cada uno de los tres siguientes fueron 4, con diferentes niveles proteicos y también idénticos en aminoácidos.
Los niveles respectivos de lisina de las 4 fases fueron 1,17 %, 1,08 %, 1,02 y 0,93 % y los de metionina + cistina de 0,84 %, 0,79 %, 0,76 n% y 0,71 %.
Resultados
Se exponen resumidos en las tablas adjuntas.
Como puede verse, la reducción de proteína de las raciones, aunque no de sus niveles de aminoácidos, afectó muy poco al peso final de los pollos y a su ingesta, aunque si al índice de eficiencia de la producción, que empeoró ligeramente.
Lo más destacado es que la reducción de la proteína dietética mejoró la utilización del N, con la consiguiente disminución de su excreción y un aumento de la sequedad de la cama, lo que a su vez repercutió en una menor proporción de pollos con dermatitis plantares.
Tabla 1. Efectos de la reducción de proteína sobre el crecimiento hasta 40 días y la utilización del N (*)
Niveles medios de proteína en cada fase, % |
20,4 | 19,5 | 18,7 | 17,9 |
Peso vivo, g | 2.808 a | 2.782 ab | 2.792 a | 2.734 b |
Ingesta de pienso, g | 4.465 | 4.480 | 4.433 | 4.423 |
Índice de conversión (&) | 1,59 | 1,61 | 1,60 | 1,62 |
Índice de eficiencia ($) | 424 a | 413 ab | 426 a | 406 b |
Consumo de N, kg/lote | 35,19 a | 33,51 b | 32,52 c | 30,76 d |
Deposición de N, kg/lote | 20,81 a | 22,56 ab | 20,77 a | 20,25 b |
Utilización de N, % de la ingesta | 58,4 d | 60,4 a | 63,3 b | 64,9 a |
Excreción de N, g/plaza/año | 439 d | 399 c | 355 b | 324 a |
Materia seca final de la cama, % | 39,5 a | 39,5 a | 44,1 b | 44,4 b |
Contenido en N de la cama, g/kg | 4,52 a | 4,30 ab | 4,08 bc | 3,95 c |
(*) Las cifras de la misma línea seguidas de unas letras distintas son significativamente diferentes (P < 0,05)
(&) Corregido por la mortalidad.
($) También llamado “Factor Europeo de Eficiencia de la Producción” y calculado en base a la edad de los pollos, la mortalidad, el peso vivo y la ingesta de pienso.
ANDREAS LEMME Y COL.
J. APPL. POULT.. RES., 28: 867-880. 2019
Etiquetas: dietas avícolas • reducción de proteína