Cada vez se tiende más a sistemas de producción que permitan un mayor movimiento de las aves, pero estos alojamientos, a pesar de ofrecer mayor bienestar, también suelen conllevar más roturas
———————————————–
Según una investigación de la Universidad de Bristol, las fracturas de huesos es una importante cuestión de bienestar en las gallinas ponedoras. Según Lindsay Wilkins, de la Universidad de Bristol, las gallinas ponedoras son particularmente susceptibles a daños en el esternón, algo que se deriva de su salud ósea relativamente pobre. Y esta situación es un problema cada vez mayor a medida que la industria avanza hacia sistemas de producción que permiten mayor movimiento de las aves, pero a la vez aumentan el riesgo de accidentes y roturas.

El Dr. John Tarlton, director del estudio efectuado por la Universidad británica, agregó que «nuestra investigación ha demostrado que los ácidos omega-3 agregados a la dieta de las gallinas ponedoras dan como resultado unos huesos mucho más fuertes, con un máximo de el 40 por ciento menos de roturas».

Etiquetas:

Deja una respuesta