Una fábrica de pienso que funciona sin personal

La fábrica de piensos de UFA en Suiza está produciendo alimentos formulados desde las 9 pm hasta las 5 am sin la asistencia de ningún operario. Durante este período, el proceso se sigue de forma completamente automática, reduciendo las necesidades de personal. ¿Podría ser una opción para reducir los costes de producción en avicultura ?

La fábrica está situada en Sursee, a 75 kilómetros de Basilea, y posee 11 empleados que producen 55.000 toneladas al año, en tres turnos diarios durante cinco días a la semana. La fábrica se construyó en 1963 y fue equipada con un nuevo sistema de control en 1993, ya que el anterior se había convertido poco a poco en obsoleto. La dirección de la empresa destinó dos millones de francos suizos (aproximadamente 1.665 millones de euros) a una serie de innovaciones, entre ellas la instauración hace unos años de un sistema de automatización para la producción nocturna. El retorno de esta inversión de capital fue de tan sólo dos años.

Ahora, el nuevo sistema de automatización una gran parte de la atención se presta a la seguridad y la fiabilidad en la programación. Todos los pisos del edificio son supervisados por detectores de movimiento. Un sistema especial de información proporciona a los bomberos, el médico de primeros auxilios y los operadores la información necesaria en caso de una emergencia.

A pesar de que esta noticia ha llamado la atención del sector por las posibles implicaciones que pueda tener en la bajada de los costes de producción, cabe recordar que en el fondo sólo ilustra «una tendencia que ya existía en el mercado desde hace 20 ó 30 años», según explica el profesor de la Universidad Politécnica de Madrid Gonzalo González Mateos, que apunta que la noticia es llamativa porque la fábrica ha pasado a cero empleados, aunque es más importante «pasar de 20 empleados a uno». González Mateos indicó también que hace 15 años trabajaba para una fábrica de pienso que ya funcionaba con una persona y media. «La mano de obra es importante para reducir los costes de producción», concedió, y agrega: «pero no debe pasarse por alto tampoco que un número cero de empleados tampoco es tan real, puesto que siempre habrá camioneros, electricistas, mecánicos, gente que emita las facturas, etc.»