La organización iniciará movilizaciones y actos de presión que finalizarán con un paro general del sector y el posible cierre de granjas
———————————————–

La Unión de Pequeños
Agricultores y Ganaderos
(UPA) anunció ayer martes 8 que llevará
a cabo movilizaciones y un paro general del sector avícola, al considerar
que las negociaciones con las empresas integradoras de pollo «están
rotas», tras la negativa de éstas a firmar un acuerdo sobre el contrato
tipo homologado.

En un comunicado, UPA de Castilla y León recordó que tras casi
dos años de «desencuentros» con los representantes de las empresas
integradoras, esta organización agraria y la Plataforma Avícola
Estatal (PAE) han dado por rotas las negociaciones, por lo que estudian otro
tipo de actos de presión con el objetivo de asegurar el futuro del sector
en España. Añadió que de esta decisión ha sido informado
el subsecretario del Ministerio de Agricultura, Manuel Lamela, que en su momento
avaló los acuerdos alcanzados entre ambas partes.
Señaló que a pesar del trabajo de consenso realizado durante todo
este tiempo, tras la reunión del pasado día 3 de octubre los representantes
del sector avícola integrado toman esta decisión «debido
a la falta de interés» de las empresas integradoras para alcanzar
un acuerdo definitivo sobre el contrato tipo homologado.

Recordó que el pasado 13 de febrero, en el seno de la Comisión
de Seguimiento, se alcanzó un acuerdo definitivo entre las empresas integradoras
y UPA, con el aval del Ministerio, para la presentación a homologación
de un contrato tipo para la avicultura de carne.
Matizó que, sin embargo, «en el último momento e incumpliendo
su promesa, los representantes de las empresas integradoras obviaron ese acuerdo».
Indicó que ante esta situación UPA y la PAE llevarán a
cabo un proceso de actos y reivindicaciones que desembocarán en un paro
nacional, «hasta que se alcance un acuerdo definitivo sobre el contrato
tipo íntegro, con garantías de su cumplimiento y un control eficaz
de los medios de producción».

Manifestó que en los últimos meses se acentuaron los problemas
que ha provocado una de las «peores crisis» y detalla que mientras
las cotizaciones en lonja siguen una tendencia al alza, las liquidaciones efectuadas
a los avicultores integrados están en los niveles más bajos a
los registrados antes del Acuerdo Marco.

UPA subrayó que esta situación se debe a la mala calidad de los
medios aportados por las integradoras para llevar a cabo la crianza de los pollos,
con un índice de mortalidad que en ocasiones alcanza el 20 por ciento,
«lo que pone de relieve los problemas sanitarios que arrastran los pollitos
al salir de la incubadora».

Destacó que además no se reúnen las condiciones óptimas
para la crianza, lo que se traduce en un aumento del índice de conversión
y por tanto reducción del beneficio de los avicultores, que en algunos
casos pierden hasta 6.000 euros en una crianza, sólo por el consumo de
pienso, a lo que habría que añadir sus costes de producción.

Añadió que con estos datos las pérdidas acumuladas por
el sector hasta el 30 de septiembre ascienden a casi 22 millones de euros, lo
que se traduce en una pérdida de renta por explotación de casi
4.500 euros.

Etiquetas:

Deja una respuesta