El negocio de la carne en la Edad Media

Durante la Baja Edad Media las ciudades de Occidente se convirtieron en grandes centros consumidores de carne. Consumir carne de buey o de otras bestias de granja dejó de ser un privilegio de los miembros de la casa real, de la aristocracia y del clero para erigirse en un rasgo distintivo de la alimentación de los habitantes de la ciudad por oposición en la dieta de los campesinos.

Barcelona no fue una excepción dentro de lo que Fernand Braudel denominó la «Europa carnívora» de después de la Peste Negra. La capital catalana disponía de canales de distribución que la proveían regularmente de ganado: cerdos criados en el entorno rural de la ciudad, toros procedentes del Principado y de la isla de Menorca, y ovejas y cabras adquiridas en las comarcas occidentales de Cataluña, donde hacían trashumancia, en el sur de Cataluña, norte de Valencia y sur de Aragón y en las comarcas pirenaicas de la Cerdanya, Capcir y el Ripollès.

Los carniceros eran una pieza clave tanto del abastecimiento cárnico de la ciudad como de la distribución y venta de la carne al por menor. Como hombres de negocios, eran considerados popularmente como el paradigma del estafador que se aprovecha de la necesidad de la gente. En Barcelona el desprecio de los profesionales de la carne se manifestaba en la actitud del gobierno municipal a la hora de controlar un negocio sucio, contaminante y violento, al tiempo que imprescindible para la ciudad. Los secretos del negocio y las tensiones entre los carniceros y el gobierno de la ciudad son minuciosamente analizados por Ramon A. Banegas en este apasionante estudio que no descuida el imaginario contradictorio, las polémicas y los tabúes que envolvieron el consumo de la carne entre judíos, musulmanes y cristianos.

Sangre, dinero y poder: El negocio de la carne en la Barcelona bajomedieval / Ramon Agustín Banegas López (Autor), Antoni Riera Melis (Colaborador) .- Milenio Publicaciones, 2017.- Colección: Crisis en la Edad Media.- ISBN- 10: 8497437063 (Amazon.es)

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