Francia exigirá indicar el país de origen en productos con carne procesada o lácteos

Francia prepara un Proyecto de Ley para que los productos que contengan carne procesada o lácteos incorporen una etiqueta que indique su origen. Esta medida, en caso de ser aprobada, se hará efectiva durante dos años (2017 y 2018) con el objetivo de que los ciudadanos estén mejor informados de aquello que compran y consumen y de que los productores de carne y leche del país obtengan un reconocimiento y una distinción de procedencia dentro del “terroir” francés.

La medida cuenta con la aprobación de la Unión Europea, cuyo parlamento ha solicitado en numerosas ocasiones una medida similar a la planteada en Francia para todo el territorio de la UE. Aun así, también hay detractores del proyecto, como algunas empresas de la industria agroalimentaria que consideran que esto se verá reflejado en un aumento de los precios y en una fragmentación del mercado único a raíz del proteccionismo que, consideran, plantea esta nueva iniciativa.

En  el caso de que esta ley se apruebe y funcione en el país galo es posible que se introduzca en toda la Unión Europea, consiguiendo así una reducción en escándalos alimentarios, una mejor información de los productos que consumimos y un reconocimiento a los productores de Europa.

Las reacciones a esta propuesta en otros países europeos no se han hecho esperar, y desde España, la rama catalana de la ASAJA (Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores), ha valorado muy positivamente esta iniciativa. Es por eso que esta asociación reclama que se lleve a cabo un proyecto similar en España, como ya han hecho otros países como Italia o Portugal. Alegan que, para mantener el cada vez más precario sector primario, hay que aplicar medidas como la que se llevará a cabo en Francia para informar a los consumidores y proteger los productos del país. Y más ahora con la llegada del TTIP, que no contempla un control tan férreo en la procedencia de los alimentos.